Control y Seguimiento Médico Frecuente en Nuestro Tratamiento de Pérdida de Peso.
Es común que cuando una persona quiere adelgazar intenta algún método para bajar de peso. Sin embargo lo deja al poco tiempo porque no ve resultados. Normalmente estos métodos incluyen algún tipo de dieta milagrosa, ejercicios extenuantes o algún fármaco automedicado.
Todos estos métodos fallan porque no ven a la obesidad y el
sobrepeso en todas sus dimensiones. Comer poco y moverse mucho no son la
solución para bajar de peso a largo plazo. En cambio, se debe motivar a un
paciente para que pueda cambiar sus hábitos permanentemente.
De esta manera, el control y seguimiento médico frecuente
logran que un paciente se motive para que pueda cambiar sus hábitos a largo
plazo. Es decir, los controles frecuentes mejoran la adherencia
terapéutica.(*1) (*2) La adherencia terapéutica o adherencia al tratamiento es
la disciplina con que un paciente sigue las indicaciones de su médico. (*3)
Por ejemplo, si un médico le aconseja a un paciente comer
400 gramos de frutas y verduras al día --y así lo hace-- decimos que hay una
buena adherencia. En cambio, si un paciente no toma la medicación que un médico
le envía --en las cantidades y horarios indicados—decimos que hay una mala
adherencia.
Pero ¿Por qué el control y seguimiento médico frecuentes
mejoran la adherencia terapéutica en un tratamiento de pérdida de peso?
Como dijimos antes, para bajar de peso, se debe motivar a un
paciente para que pueda cambiar sus hábitos a largo plazo. Esto no es tarea
sencilla y no se logra con visitas semanales ni mensuales al médico, mejores
resultados tienes los controles interdiarios.
Muchas veces una persona fracasa cuando quiere adelgazar
porque se desmotiva al no ver buenos resultados. Por eso el control de peso
interdiario es importante. Con esto un paciente se percata de la pérdida de
peso en cada control médico y así se motiva a continuar con el tratamiento.
Con frecuencia un paciente no sigue las indicaciones
médicas, no porque así lo quiere sino inconscientemente o por falta de
información. Hay varios ejemplos, pero podríamos citar el de las frutas.
Por ser alimentos naturales, las personas creen que comer
muchas frutas no engorda y es saludable. Sin embargo esto no es del todo
cierto. Las frutas son alimentos que pueden engordar y no ser saludables si se
comen en exceso.
Así que, muchas veces, un paciente no baja de peso porque
inconscientemente no sigue las indicaciones médicas y come porciones más
grandes de las recomendadas. Corregir estos errores a tiempo --y no luego de un
mes—es importante para perder peso eficientemente.
Por eso son importantes los controles interdiarios. Es casi
imposible recordar con claridad lo que hicimos o comimos hace un mes o una
semana, pero es fácil recordar lo que comimos ayer. Así, un médico puede
reconocer los errores, repetir y volver a repetir las indicaciones hasta que un
paciente adquiera un hábito saludable.
Además hay condiciones que pueden interferir en la reducción
de peso. Por ejemplo durante el ciclo menstrual es difícil adelgazar porque se
retienen líquidos. También, cuando una persona se estriñe no pierde peso.
Detectar estas condiciones a tiempo y
darles solución pronta ayuda a adelgazar eficientemente.
Por otro lado, la pérdida de peso a largo plazo depende de
la información que tiene un paciente para mantenerse en el peso deseado. Esta
información no se puede solventar en una sesión, de hecho las personas tienen
muchas preguntas y con frecuencia no las recuerdan.
Son dudas frecuentes: ¿Dormir poco y el estrés engordan?
¿Por qué?, ¿Los edulcorantes y las bebidas light ayudan a adelgazar? ¿Por qué?,
¿las calorías engordan?, ¿la sal sube de
peso? Y los carbohidratos ¿causan obesidad?, y ¿las proteínas?, y ¿las grasas?
Estos son unos pocos ejemplos de todas las dudas que se
deben despejar durante un tratamiento de pérdida de peso. Toda esta información
se transmite durante los controles médicos conforme transcurren las sesiones y
un paciente avanza en su tratamiento.
En resumen, el seguimiento y control médico frecuente es
importante en un tratamiento de adelgazamiento porque motivan a un paciente a
mejorar sus hábitos. Ayudan al médico a
identificar errores en los hábitos de una persona y condiciones médicas que
pueden interferir en la pérdida de peso.
Además le dan a un paciente tiempo para que pueda adquirir el
conocimiento suficiente y no vuelva a engordar.
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